Dorada es la luz
igual que el oro que te pertenece.
Derrama tu pureza cristalina,
Orisha de las aguas dulces.
Que ningún niebla obscurezca
mi deseo más profundo,
que es conseguir el amor verdadero,
seguro, eterno y perdurable.
Madre, que estás presente en las cascadas,
que son sagradas en sí mismas:
Aleja de mi, todo sentimiento de sufrimiento.
Que no derrame yo una lágrima
por los que no correspondan a mi amor.
Que no sufra yo por cualquier persona que,
que me mienta o, que me falte al respeto,
Que no sufra yo la envidia
o que los celos me traicionen.
Eres dulce, protectora,
suave y coqueta,
femenina y seductora.
Oh, madre Oshun!
Dame tu encanto,
Dame tu fuerza,
dame la alquimia como néctar sublime,
que yo sé cómo respetar y reverenciar.
En la miel esta tu secreto,
Y su dulzura yo voy a utilizar.
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